"En 1945, Japón estaba completamente arruinado y su recuperación no se produciría hasta 1950,
cuando Estados Unidos realizó compras masivas para abastecer a las tropas instaladas en Corea.
Como primer resultado de ello, y con amplios créditos de los bandos americanos, se reinició la
producción industrial que posibilitó la exportación de productos textiles, electrónicos y fotográficos.
(...) Antes de terminar la década de los setenta, Japón llegaba al mismo nivel que Alemania occidental,
disputándose el tercer lugar como potencia económica detrás de los Estados Unidos y la Unión Soviética".
Araceli,R.,Oliver, J.,Segura, A., El mundo actual.
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